Tenían por misión lavarse la cara después de ese amargo empate en casa ante
Pacífico, pero Alianza se dio un baño completo, subió a las alturas y desde ahí
“reyna” en la punta del descentralizado.
El partido se acomodó a lo trabajado por Valencia, Melgar dio los espacios
suficientes y pagó caro sus desconcentración, nunca asumió su condición de
local y le cedió la iniciativa a los grones que desde el inicio se propusieron
traer la Lima los tres puntos.
Heredia se convirtió en pieza clave del triunfo, su destacada actuación fue
la cuota de seguridad en el fondo. Los laterales se sumaron al ataque con
propiedad, la dupla de centrales aunque inédita siempre fue solvente y alejaban
el peligro sin hacerse problemas.
Beltrán y Albarracín impusieron dinámica y marca agresiva, Quinteros y
Bazán fueron nexos importantes con la pareja ofensiva que invirtieron los
papeles; Mostto sirvió de distracción y apoyo para que Reyna las añadiera.
Lo de Yordy merece un párrafo aparte. Se metió en medio de los centrales
arequipeños y se acercó bastante el nivel del sudamericano sub 20. El primer
gol fue una pinturita, recibió un pase largo de Mostto sobre el borde del área,
ingresó el cajón grande y mandó a comprar pan al defensa dominó (que se quedó
con el vuelto) y definió lejos del golero. El segundo sólo tuvo que pegarle
fuerte dentro del área para completar una incursión de Coco Bazán.
Ahora viene otro reto importante, en casa contra Garcilazo que viene motivado
por la buena campaña en Libertadores. El reto es para Valencia y demostrar que
lo de Pacífico es pasado.
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