La terrible actualidad que vive el cuadro blanquiazul se agrava con la dolorosa derrota en Venezuela. Los victorianos ganaban 2-0, pero la última media hora de juego fue para el olvido; después de insinuar una mejoría en su rendimiento, replegaron líneas y se dejaron voltear el marcador sobre los minutos finales.
El ritmo de competencia le está costando a Alianza Lima durante toda la temporada. Pablo Bengoechea no pudo encontrar el rumbo con este plantel y decidió dar un paso al costado; llegó Mario Salas y con su sabida rigurosidad tampoco parece encontrar el norte en el torneo local y ahora en la competencia internacional.
Alianza Lima visitó a Estudiantes de Mérida en el reinicio de la Copa Libertadores y, curiosamente, llegaba como favorito porque el torneo peruano tiene varias semanas en competencia, mientras que el país llanero aun no reinicia el fútbol profesional.
Salas formó el once inicial con lo mejor que tenía a disposición; demás está recordar que el plantel se debilitó con la salida de Balboa y Rodríguez, la suspensión que acarrea Rubio, la lesión de Da Silva y el error en los trámites de Aguilar.
Los locales manejaban el balón con propiedad, no se notaba el tiempo de para en la liga venezolana, Estudiantes mandaba en la cancha, su ataque se acomodó por el lado izquierdo, Rosell la pasaba mal, Gómez no apoyaba en los relevos, Quijada se batía como podía y Butrón se exigía. Con mucha suerte no se abrió el marcador en la primera etapa.
Para el complemento Alianza Lima regresó más enchufado, desde los primeros minutos se fue en busca del arco local, como consecuencia del atrevimiento Arroé recibió una falta en el área, castigada por el juez Gallo con un tiro desde los doce pasos que fue bien ejecutado por Alexi Gómez. 1-0 a favor de Alianza a los 50 minutos de juego.
Por si fuera poco, el mismo Joazinho aumentó la cuanta cuatro minutos después con una definición de calidad. 2-0 para los íntimos y se podía ir por más, pero lamentablemente se soltó la presión alta de este importante arranque, se retrocedió líneas y se le dejó crecer nuevamente a Estudiantes.
Salas practicó variantes para mantener el resultado (Cornejo x Cruzado y Zúñiga x Sánchez), sin embargo el local seguía creciendo, encontró el descuento al minuto 64 y la paridad a los 81. De ahí, el resto del encuentro ya fue una lucha de poderes, el juez le negó un penal a Alianza Lima tras una clara mano en area venezolana y en el minuto final de la adición, Quijada trabó a Mena dentro provocando el panal para los locales que fue capitalizado por Rivas para sentenciar el 3-2 final.
Otra dolorosa caída en la temporada, el 2020 le pega con toda su furia a Alianza Lima.
No hay comentarios:
Publicar un comentario