Es para preocuparse, no poder ganar tres encuentros en condición de local enciende alarmas en cualquier club, pero Pablo Bengoechea, intentando poner paños fríos a la situación, insiste en que la intensión es celebrar a fin de temporada.
Pero como se pretende celebrar a fin de año si desde el comienzo se acabaron las ideas, en apenas unas fechas se acabó el crédito del buen arranque con la victoria en el clásico, si la presión de la propia hinchada les pesa cual ancla lanzada para detener un barco.
Ante UTC poco o nada se mostró de los chispazos de buen fútbol que se vieron en los primeros partidos. El pelotazo fue la herramienta mal utilizada durante los noventa minutos y la mala furtuna que se empecinó en lesionar a los encargados de crear miedo en área rival gana por goleada.
Los cajamarquinos mostraron mucho oficio y mejor asociación a la hora de generar ocasiones de gol por eso consideramos que al final el punto conseguido tras el 0-0 esta vez vale la pena.
El regreso de Cruzado había generado expectativa en el hincha, el DT le encargó la cinta de capitán, pero Rinaldo está muy lejos aún de su mejor nivel. Germán Pacheco, recuperado de la lesión, fue bien resguardado por la marca visitante al igual que Luis Aguiar, por eso hubo poco peso en la generación de fútbol y ocasiones de gol.
En defensa se sufre mucho y se cometen errores que pueden costar con delanteros de jerarquía.
Queremos creer que solamente fue un mal partido, que el domingo ante Aurich será otra historia y que empezaremos a celebrar nuevamente.
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